El capital privado en el desarrollo del país


La infraestructura vial en el país experimentó un importante cambio estructural tras la promulgación de la Constitución Política de 1991, que permitió la participación del capital privado en su desarrollo. Esta decisión marcó el inicio de una verdadera transformación en la industria, abriendo la puerta a una colaboración conjunta entre el sector público y privado.

Puerto Antiquia, ejemplo inversión capital privado.

Uno de los acontecimientos fundamentales en este proceso fue el surgimiento del modelo de Alianzas Público-Privadas (APP), el cual permitió que diferentes segmentos trabajaran en conjunto para llevar a cabo proyectos de infraestructura. Este concepto quedó plasmado en el artículo 32 de la Ley 80 de 1993, junto con el de concesiones, lo que generó un creciente interés por invertir en el sector.

Entidades que ha ayudado a estructurar

En ese sentido, se estableció la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) como reemplazo del Instituto Nacional de Concesiones (Inco) y se creó la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN), con el propósito de apoyar iniciativas ambiciosas en el ámbito de infraestructura.

Con estos avances, el sector de transporte adquirió una mayor institucionalidad y un enfoque más claro, lo que permitió a los expertos trazar una hoja de ruta a largo plazo. Este plan fue materializado en el Plan Maestro de Transporte Intermodal (PMTI) 2015-2035, que se ha extendido hasta 2045 con el respaldo de especialistas.

En paralelo, el Estado promulgó la ‘Ley APP’ (Ley 1508 de 2012) para establecer un marco jurídico que regule las Asociaciones Público-Privadas, así como normas orgánicas de presupuesto y fijó un monto mínimo de $6.000 Salarios Mínimos Legales Vigentes (Smmlv) para aplicar esta modalidad.

Ley de infraestructura

Posteriormente, se dio paso a la ‘Ley de Infraestructura’ (Ley 1682 de 2013), que estableció un marco normativo para superar el atraso en infraestructura de transporte que existía en el país. Esta legislación permitió abordar aspectos fundamentales como la gestión predial, ambiental y de redes, impulsando así un desarrollo más eficiente y sostenible en este ámbito.

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